Mientras más famoso se hace un servicio, las probabilidades de que lleguen los spammers aumenta en proporciones exponenciales. Twitter se mantuvo libre de este tipo de acciones o al menos lo controló bastante bien (en parte por la estructura misma y su funcionamiento). Pero, en los últimos tiempos se habían observado acciones como éstas:
- Recibir replies automatizados de bots que colocan enlaces.
- Bots que analizan y republican mensajes que contienen palabras o frases que son un trending topic.
- Personas que dan su usuario/contraseña a aplicaciones que luego usan el sistema para mandar mensajes privados promocionales a contactos.
- Bots que agregan miles de usuarios al día, muchos de los cuales siguen de vuelta, para después enviarles mensajes privados y replies indiscriminadamente.